El Carnaval de Tlaxcala tiene sus raíces en las celebraciones prehispánicas de los pueblos indígenas de la región. Antes de la llegada de los españoles, los tlaxcaltecas, al igual que muchas otras culturas mesoamericanas, celebraban festividades dedicadas a sus deidades, con rituales que involucraban danzas, música, disfraces y festines. Tras la conquista española y la evangelización de la región, muchas de estas festividades paganas fueron fusionadas con celebraciones cristianas, como el Carnaval, que se celebra justo antes del inicio de la Cuaresma. El Carnaval en Tlaxcala, al igual que en otras partes de México y del mundo, se convirtió en una festividad que marcaba el periodo previo a la abstinencia y la penitencia de la Cuaresma. A lo largo del tiempo, el Carnaval de Tlaxcala ha evolucionado, integrando elementos de la cultura española y las tradiciones locales, así como influencias de otras regiones de México. Hoy en día, el Carnaval de Tlaxcala es una celebración colorida y animada que incluye desfiles de carros alegóricos, comparsas, música, bailes, disfraces elaborados y una amplia variedad de eventos culturales y recreativos. La historia del Carnaval de Tlaxcala refleja la rica diversidad cultural de la región y su capacidad para adaptarse y transformarse a lo largo del tiempo, manteniendo viva una tradición que tiene sus raíces en la antigüedad prehispánica.